sábado, 14 de julio de 2012

Computadora de coche ¡en 1980!


Creo que han tenido cierto éxito estas informaciones retrofuturistas así que aquí van tres en lugar de una sola.
Y estos tres artículos que os traigo hoy provienen de una hoja casi entera de mi revista de adolescente incluida en el número 751 de Science & Vie. Lo que leeréis ocurrió en abril de 1980, hace pues unos 32 años.
La primera, la podéis ver en la parte de abajo a la izquierda de la página:

Dice: FOTOCOPIAS REDUCIDAS

Me encanta porque nos muestra que lo que ahora nos parece de lo más obvio, tuvo necesariamente un comienzo. Y que incluso era ya extraordinario el hecho de hacer fotocopias en aquellos principios. Y además, en este caso, se daba la noticia vanguardista de que la firma OCE-Photosia era capaz de reducir "hasta un 50%" el tamaño del original. Como mérito añadido comentan que la primera copia sale en 6, 5 s y que el aparato es capaz de ofrecernos enseguida un débito de 45 copias / minuto. ¿Genial no?

Comentamos ahora el articulito de abajo a la derecha:
 Dice: CALIENTES LAS CERRADURAS, CALIENTES...

Se refiere a una llave llavero a pilas que calienta la hoja de la llave del coche de tal manera que acaba funcionando incluso cuando la cerradura está congelada. Un caso muy común - creedme - en las húmedas latitudes de Paris.

Esto me recuerda por cierto a mi mismo a los catorce, mirando por la ventana a mi padre irse al trabajo a eso de las cinco de la mañana. La ancha calle invernal salpicada de conductores parisinos MEANDO sobre las cerraduras de sus coches.

Todos menos mi padre. Lo juro. Mi padre se llevaba siempre una botellita de alcohol de quemar :-)

Y este es el artículo principal de esta página que dice así:
UNA COMPUTADORA DE COCHE EN VENTA EN LOS GRANDES ALMACENES.

Lo que me gusta de la foto es el parecido del gesto con el dedo del conductor de 1980 con el mismo de un conductor actual (¡32 años después!) manejando su GPS. El parecido es más real si no nos fijamos en los mandos del aire del fondo, ni en el aparato en sí.
Me llena de melancolía ese futuro recuerdo de una foto en blanco y negro previendo un gesto que tardaría 32 años en hacerse corriente de verdad.

Entre otras cosas porque dudo que el aparato de la foto se hiciera muy popular. Yo, en todo caso, no recuerdo haberlo visto en su día en ningún coche.

Pone en el artículillo que se llama el Compucruise 44 (muy apropiado) y que se trata de una mini computadora americana que nos ofrece dos (!!!) funciones diferentes. Por un lado nos da todo tipo de información acerca de la preparación del viaje: consumo de carburante, velocidad, tiempos, distancia así como las relaciones entre esos distintos valores.

Por el otro, nos ofrece un regulador de velocidad (¡¡¡) perfeccionado que puede adaptar la velocidad que hayamos preseleccionado. 

Todo esto - avisan al final - mediante una algo complicada instalación en el coche (sea manual o automático) y... mucha paciencia para regular y normalizar todos los aparatos de medida.

Terminan con un lacónico "¡Buen coraje y buen viaje!".

¡Una monada!

3 comentarios:

miguell dijo...

¡El futuro es ahora!, se dice a ve ces...Pero también se podría decir: ¡El futuro es ayer! :D

Muy curioso todo :-)

Yo encontré el otro día un aparatito bastante curioso también, nuevo. Se trata de un boligrafo que calma dolores de todo tipo, aquí un extracto, y después la web:

"Painzap es un bolígrafo compuesto por un botón que cada vez que se presiona da un impulso eléctrico al otro extremo donde se encuentra la plaquita de metal, que se coloca sobre la zona del dolor o el punto de estimulación el cuerpo. Con una pequeña descarga apenas perceptibles en una frecuencia baja (1-2 Hz) de 0,000006 amperios se estimula dicho sistema nervioso. Unos 30 - 35 impulsos suelen ser suficiente para notar un alivio de horas en un par de minutos.
Se puede repetir el tratamiento 2-3 veces al día.
Con Painzap se puede tratar cualquier tipo de dolor en cualquier momento del día en cualquier lugar. "

http://www.medi-marketing.es/index.php?option=com_content&task=view&id=14

miguell dijo...

Me pregunto yo, si tal vez en una de esas revistas de tu pasado-futuro-presente, ya existiera algo así como este Painzap.

Marc Gasca dijo...

Seguro que existía algo parecido. Francamente me da toda la impresión de ser una engañiza (algo más elaborada) del tipo de las pulseras magnéticas.