sábado, 23 de julio de 2011

Consignas interesadas


Siempre me ha parecido curioso que cuando tocas estos temas sobre si tal o cual actor debe de ser homosexual, la gente suele saltar y aludir a que cada cual vive como quiere y que a nadie le importa la sexualidad de los demás.

Estoy absolutamente de acuerdo en lo primero pero no en lo segundo.

Los actores son gente pública que vive de su imagen y del interés que sus hechos y miserias producen en los demás. Es la historia de siempre: asumir que los privilegios implican siempre algún compromiso de vuelta, una responsabilidad inherente al “cargo”.

Quede claro que no justifico el inmiscuirse en la vida de los actores porque expongan sus personajes sobre la gran pantalla. Sé diferenciar la parte pública de la privada. Faltaría más. Pero también es cierto que sus vidas despiertan inevitablemente más interés que la mía o la vuestra y que la curiosidad es humana. También entiendo que ellos mismos explotan sus vidas en el sentido de que siguen interpretándolo para vendernos una imagen de sí mismos más o menos edulcorada. Todos lo hacemos pero ellos en plan profesional.

Así pues, entiéndase bien que no justifico el lanzarnos como bestias sobre sus pasos en los supermercados o restaurantes. Solo digo que si podemos indagar en la red acerca de los muchos artículos que hablan de ellos, hagámoslo (como de hecho lo hacéis).

A menudo los políticos se quejan también de la falta de privacidad de sus vidas. Véase las hijas de Zapatero. Bueno. Me parece que eso va con el cargo. De hecho, ellos están mucho más protegidos que cualquiera de nosotros en todos los sentidos así que si hurgamos un poco en sus vidas… no me dan ninguna pena.

Otra cosa: los actores suelen vendernos su heterosexualidad para engatusar a todo el sector de su público que pueda soñar con ellos. Qué queréis que os diga, a mi me parece bien desfacer entuertos.
Pero no. Siempre hay quién se erige en defensor de causas defendidas y se ofende por las injerencias en las vidas de los famosos (que son famosos porque se conocen sus vidas).

Tengo bien clasificada este tipo de respuestas como otra consigna más, insertada en el subconsciente colectivo de la sociedad. Otra de las consignas (a seguir) injertadas muy aviesamente para defender a los que ya lo están (por estas mismas consignas). ¿me seguís?


Es una más de las “ideas” de respuesta sospechosamente inmediatas e uniformes de la gente que me rodea. ¿Cómo es posible que siempre me contestéis lo mismo?

Son las mismas respuestas que justifican que Clinton era muy simpático porque hacía lo que cualquier hombre de su posición haría: que se la chupe una becaria.

Si pensáis un poco en ello, se trata precisamente de un tipo de razonamiento aberrante como explicaba en mi anterior entrada.

Este tipo de razonamientos aberrantes está perfectamente estudiado en psicología social:

Es bien sabido que lo primero que utilizan las sectas para captar a sus futuros esclavos es precisamente ese tipo de asentimiento repulsivo del cual jamás podrán zafarse. Suelen pedirles que rompan sus lazos con la familia de la manera más brutal posible. Por ejemplo mediante una llamada telefónica en la que le dicen a sus padres que no son nada para ellos y que han encontrado la felicidad con su “nueva familia”.


El mecanismo que se pone en marcha a continuación es simple pero efectivo. Cuando el "ya esclavo" ha caído en la primera y definitiva trampa de renegar de lo único que realmente ha sido un bien para él mismo, solo le queda un camino: proseguir en esa línea para justificar esa primera aberración.

No hacerlo significaría haberse equivocado. Y eso suele ser algo que a la gente no le gusta plantearse.

Debo decir que entiendo perfectamente el mecanismo sectario porque yo mismo lo sufrí a mi manera y me costó mucho razonar sobre ello y entender cómo podía haberme alienado de tal manera. Alienado en el sentido literal de la palabra. Cuando me recuerdo de entonces no sé quién era esa persona que era yo.

Pero volviendo a las consignas interesadas, por ejemplo aquellas que brotan inconscientemente cuando le digo a alguien que soy anarquista: si. Es muy bonito pero se trata de una utopía.

Recuerdo que lo de la utopía se utilizó mucho contra la Izquierda Unida de Julio Anguita. Muchos amigos míos simpatizantes de IU preferían votar PSOE por aquello del voto útil contra “la Utopía”.
Como siempre, pienso que los poderes fácticos les habían metido otro gol.

De hecho, la consigna general en este caso es la de relacionar Utopía con imposibilidad… y cuela.

Otra de las consignas es la de convertir el voto en una obligación moral (o a secas).

Ya sabéis las respuestas Paulovianas:  

Si no votas, permites que gane la derecha (o la izquierda).

Si votas en blanco o  nulo, le regalas el voto porcentual al más votado.

Esto, realmente nadie lo entiende muy bien pero es intuitivamente coherente.

¿A nadie se le ocurre preguntarse por qué son estas unas de las pocas cuestiones sobre las que se ponen de acuerdo todos los partidos?

Solo por eso merecería la pena plantearse no seguirles la corriente a ninguno de ellos.

Preguntas inconclusas

Lo bueno de cumplir años es el bagaje intelectual que consigues acumular. Son tantas las dudas cosechadas durante la infancia que resolverlas se convierte en uno de los más consistentes placeres de la madurez. Yo personalmente adquirí ciertas dudas (y deudas) propias de mi generación. Estaban las preguntas del tipo de ¿quién mató a Kennedy?, ¿a Marilyn?, ¿pisó el hombre la luna? ¿qué le pasaba al Apollo 13?...

De sesgo más particular estaban otras preguntas como: ¿Quiénes eran esas Panteras Negras que levantaban su desafiante puño negro en los juegos olímpicos de Méjico en el 68?, ¿qué había ocurrido exactamente en los juegos de Múnich del 72 con la delegación de Israel?...

Como habréis notado, muchas de estas preguntas se vieron contestadas sin mayor dificultad gracias a películas de Hollywood y a google. Muchas otras se aclararon, si no del todo, en algún grado o hasta cierto punto no plenamente satisfactorio pero rebajando el nivel de ansiedad en alguna medida.

Y yo, además de estas y muchas más preguntas, también tenía otras más triviales pero no menos mosconas acerca de informaciones incompletas o evidentemente manipuladas.

Para los más jóvenes que puedan estar leyendo estas líneas hay que aclarar que en aquellos tiempos (en mi experiencia, de los sesenta a los noventa) no era fácil investigar las escuetas informaciones que recibíamos por el sesgo del transistor o más tarde de la televisión.
No es que fuéramos más tontos, es que teníamos muchos menos medios y los “poderes fácticos” estaban encantados con ello.

¿Cómo explicaríamos hoy en día por ejemplo la cuestión de la muerte de Kennedy? Cómo toda mi generación, estoy convencido de que la CIA (o cualquier sub gobierno americano) manipuló convenientemente la información que nos ofrecieron de lo que había ocurrido en realidad. El mecanismo que utilizan los grandes poderes es siempre el mismo que utilizan las sectas (y algunas parejas) al reclutar a sus corderos: el pensamiento aberrante

Se basa en el “Credo quia absurdum” de los clásicos.

Se trata de presentarnos una explicación tan demencial y contra natura que la población llega a plantearse que es imposible que el papá gobierno se invente una estupidez de tal calibre.

“Es tan absurdo que debe ser cierto” piensan todos.

Y sino ¿cómo explicar las “teoría de la bala mágica” para explicar la muerte de Kennedy?

Para los que no lo sepáis, el gobierno americano explicó la muerte de Kennedy gracias a la hipótesis de una única bala que había sido capaz de variar su trayectoria en el aire de manera que había incidido en varias partes del cuerpo del presidente de EEUU. Con esto se justificaba la afirmación de que solo había habido un franco tirador.

La historia era completamente alienante pero nos obligaron a tragárnosla.

Y si. Ya digo que el tiempo nos va aclarando las cosas, por ejemplo gracias a las películas. Para la muerte de Kennedy tuvimos la excelente película JFK de oliver Stone que a mí personalmente me encantó. Pero esta es una de las historias que siguen sin explicarse en absoluto. Es más: aunque la película JFK ordena admirablemente los hechos ocurridos en Dallas, tampoco acaba de explicar ninguna de las dudas generadas desde entonces. De hecho, incluso le reprocho a la película que siga dándole cartas de nobleza a la teoría de la bala mágica. Está tan bien explicada que la hace atractiva e interesante. Esto es: añade manipulación a la manipulación.

De las preguntas contestadas de mi vida agradezco sin embargo plenamente la del Apollo 13. Todavía recuerdo oír junto a mi madre en 1970 como daban la noticia en la radio de que los astronautas tenían problemas graves y que pintaba muy mal para ellos. Pero no pude saber exactamente lo que les pasaba hasta casi treinta años después gracias a la película sobre sus desventuras.

Estas historias son las que agradezco de corazón y por las que me felicito cada día por vivir uno más.

La otra historia que siempre me supo a “quemado” era la de la pareja Tracy-Hepburn. Recuerdo la simpatía que despertaba en la gente en general y en mi madre en particular.

Habréis notado que cito mucho a mi madre. Es porque la mayoría de mis preguntas “incontestadas” se generaron junto a ella y ante las noticias de la radio. Por cierto que una de esas preguntas era referente a cómo podían oírse voces de un aparato tan pequeño. Cómo los años me han convertido en técnico de sonido de radio, y presentador a ratos, es evidente que yo mismo contesté a muchas de mis preguntas.

Bueno. Volviendo a lo de Tracy-Hepburn: la teoría de la bala mágica de Tracy Hepburn consistía en que Katharine Hepburn y Spencer Tracy se habían enamorado durante el rodaje de “La mujer del año” y que habían iniciado entonces un idilio ilícito que había durado toda su vida.

Esta historia siempre me rechinó por todos los costados.

Lo primero era la simpatía que despertaba una relación que para los parámetros de la época era de lo más inmoral.
Al parecer Tracy era muy católico, y como estaba casado, no quería divorciarse. Sin embargo esto parecía aumentar el romanticismo de la relación con la Hepburn. Primera “bala mágica”.

Yo no entendía por qué no se tenía en cuenta el humillante papel de la mujer de Tracy, aunque se la considerara compinche y encubridora de esa situación. En realidad se entendía como una especie de “ménage à trois”. Segunda “bala mágica”.

Entiéndase bien que no tengo nada contra los hechos considerados inmorales por la sociedad. No me importan los ménages à trois, las infidelidades o las tendencias sexuales de cada uno. Soy un libre pensador y a todos vosotros os confiero plena libertad en vuestros actos más íntimos (mientras respetéis los de los demás). Pero aquí se trata de desentrañar una historia que me contaron desde niño y que no acaba de encajar… hasta ahora.

Sí. Una de las alegrías de vivir un día más es poder explicarse uno más de los enigmas expuestos años atrás. Este en particular lo desveló William J. Mann con su libro “Kate: The Woman who was Hepburn”. Aquí, Mann trata de mostrar el lado más oscuro de la actriz. Relata episodios como los malos tratos sufridos en su infancia, el presunto suicidio de su hermano a los 15 años, la bisexualidad de la andrógina estrella o la de todas sus parejas masculinas, incluído Tracy.

Ahí es nada. Por fin me explicaba una historia razonable sobre la pareja Tracy-Hepburn, una historia que encajaba todas las piezas de una manera aceptable por coherente.

Ahora entiendo que se tratara de la típica pareja “amañada” para tapar sus verdaderas relaciones homosexuales. Lo mismo ocurre hoy en día con multitud de otros actores de Hollywood. Tom Cruise por ejemplo. Quedó muy clara su escondida homosexualidad cuando Mimi Rogers, su efímera mujer  comentó al día siguiente de “su primera noche” que el actor la había claramente engañado en cuanto a su disposición en la cama. A partir de entonces, el cienciólogo se preocupó mucho y bien por tapar todo lo tapable haciéndose ver junto a multitud de actrices (cómo “nuestra” P) que obtenían en cambio un trampolín para la fama Hollywoodiense. Por cierto que parece que la pareja Nicole Kidman-Tom Cruise tiene todos los visos de ser el reflejo actual de los Tracy-Hepburn.

Lo que siento de verdad en este asunto es que vivamos en una sociedad que obliga a la gente a inventarse unas vidas alternativas para poder sobrevivir a la estupidez de los convencionalismos.

Pero yo por lo menos resuelvo alguna duda más... y pasa la vida.

Mann atribuye bisexualidad a casi todos los hombres con los que Hepburn estuvo relacionada alguna vez. También otorga gran importancia a un hombre llamado Scotty, que gestionaba una gasolinera cerca de la casa de Cukor y dispensaba más que gasolina. Scotty dice incluso que Spencer Tracy fue una de sus parejas sexuales. El libro trata esas revelaciones con más curiosidad que lascivia. Mann sostiene plausiblemente que su verdadero interés es cómo se esculpió y mantuvo la gran fábula del romance Tracy-Hepburn.


”El pulpo en el garaje”, como lo describe el autor, es por supuesto el afecto de toda la vida de Hepburn por las mujeres. Desde su temprana amiga Laura Harding, que se describía a sí misma como ‘el marido de la señorita Hepburn’, a Phyllis Wilbourn, una acompañante de 40 años sobre la que Hepburn dijo: “Phyllis y yo somos una sola”, las mujeres figuran prominentemente en la mente de Mann. Su objetivo es menos detectar relaciones lésbicas que reiterar la enorme divergencia entre la imagen pública y privada de Hepburn.

En su tercera parte, el libro describe la larga vida en el escenario de Hepburn después de que sus días de glamour en Hollywood habían terminado. “Las personalidades cinematográficas van y vienen, pero Khatahrine Hepburn tenía la intención que quedarse más tiempo”, escribe. “El único modo de hacerlo era convirtiéndose en una institución”. Si no hubiese decidido aparecer tan estratégicamente en ‘La reina de África’ (The African Queen) —o, en otros momentos, ‘León en invierno’ (The Lion in Winter), ‘Adivina quién viene esta noche’ (Guess Who Is Coming To Dinner) y ‘En el estanque dorado’ (On Golden Pond)—, su historia habría sido bastante más corriente.


Siento si todo esto os parecen simples cotilleos. Yo lo tomo más como respuestas a mi curiosidad. No me gusta que me tomen el pelo así que intento desentrañar todas las cosas que no encajan.

Y me encanta que cada día de vida me dé una oportunidad más para conocer esas respuestas inconclusas. Aunque a la gente no gusta que...

viernes, 8 de julio de 2011

Marcel Pagnol en su propia voz

Al igual que habíamos escuchado al mismísimo Léon Tolstoi, escucharemos hoy al gran cineasta de Aubagne (al lado de Marsella), Marcel Pagnol (en fr.).


Es posible que su apellido provenga precisamente de que sus familia es descendiente de españoles de Romanos (Zaragoza) que emigraron al sur de Francia en el s. XV

Pagnol, mirador de lo natural, reinventa el cine “audiovisual” predicho por Einseintein:
Pagnol pasó del teatro al cine. Luego fue (en Francia) el gran impulsor del cine sonoro primero y del cine en color después: el Rouxcolor, una patente muy francesa de los hermanos Roux. 


Por cierto que esta incursión técnica de los hermanos Roux en 1930 no llegó a grandes cuotas de éxito a pesar del esfuerzo de Pagnol por publicitarlo. Concretamente en su película "La belle meunière" (la bella molinera). Hay que decir que el sistema Roux necesitaba demasiadas complicaciones técnicas a la hora de proyectarse para resultar cómodo. Al final triunfaría un sistema mejorado desde 1915: el Technicolor.

Años 50: Así define Pagnol el salto desde el teatro al cine:

Nous sauterons la rampe, nous tournerons tout autour de la scène, nous ferons éclater tout les murs du théâtre, nous mettrons en morceaux les décors et l’acteur, et la voix fera exploser l’espace.

Saltaremos la rampa, le daremos la vuelta a la escena, haremos estallar todos los muros del teatro, despedazaremos los decorados y al actor, y la voz hará estallar el espacio.

Y esta es todavía una mejor explicación que podemos escuchar en su propia voz. La subtitulo y la traduzco. (Aguantad la publi, son unos segundos).

Le privilège du metteur en scène sur le théâtre, c’est qu’il peut isoler le centre d’intérêt et lui faire remplir tout l’écran. Tandis qu’au théâtre, quand on fait une soirée mondaine par exemple : c’est la chose la plus ridicule du monde n’est-ce pas ? Y’a une demi douzaine de figurants qui se promènent, qui font semblant de parler pendant qu’il y a une scène qui se déroule autour du souffleur entre jeunes premiers et jeunes premières. C’est ridicule. Ce qui est merveilleux au cinéma c’est que tout à coup on fait voir la soirée mondaine et tout à coup on isole ceux qui parlent et les autres, ont ne les voie plus. On les entend, on sent qu’ils sont là, mais ils ne vous gène pas. Par exemple, nous, nos grands-parents, ça faisait des gros plans au théâtre, ils avaient des lorgnettes. Ils avaient des lorgnettes et qu’ils braquaient toujours sur leur centre d’intérêt, sur ce qui les intéressait. Et puis il faut savoir à quel instant le grand-père tirait sur sa lorgnette et ce qu’il regardait, lorsqu’on fait la mise en scène d’un film.

La ventaja del realizador (de cine) sobre el teatro es que puede aislar el centro de interés y llenar con él toda la pantalla. Mientras que en el teatro, cuando presentamos una velada mundana por ejemplo: resulta de lo más ridículo, ¿verdad? Tenemos a media docena de figurantes que se pasean, que simulan estar charlando mientras la escena se desarrolla en torno al apuntador entre actores y actrices principales. Es ridículo. Lo que es maravilloso en el cine es que de repente mostramos la velada mundana y de repente aislamos a los que están hablando y a los demás, ya no se les ve. Los intuimos, sabemos que están ahí pero no nos molestan. Por ejemplo, nosotros, nuestros abuelos, ellos hacían primeros planos en el teatro. Tenían prismáticos. Tenían prismáticos que dirigían siempre hacia su centro de interés, sobre aquello que les interesaba. Pues bien, hay que saber en qué momento el abuelo tiraba de prismático y qué es lo que miraba, cuando realizamos una película.
En cuanto a los sabrosos y siempre polémicos personajes de Pagnol:
Un poco de La femme du boulanger (la mujer del panadero) de 1938.
Dos compañeros visitan al cura Barnabé. Todos tienen un acento marsellés muy marcado. La disputa me recuerda vagamente otra ocurrida dos mil años antes entre un tal Alejandro y otro tal Diógenes. Los escuchamos, subtitulamos y traducimos:
(Aguantad otra vez la publi, siguen siendo unos segundos).
-         Oh bas l’abbé.
-         Alors quoi.
-         Et ben écoute-moi. Ces trois ormes ils te servent à rien. Ils  sont juste au bord de ton prés. Alors qu’est-ce que ça peut te faire de les tailler? Au contraire, ça te ferait du bois pour cet hiver.
-         Ah mais ces arbres ils sont à moi ! Ils sont chez moi. Je les taillerai si ça me fait plaisir. Ah mais tout de même tu ne vas pas m’obliger de couper des arbres qui sont chez moi?
-         Ah oui. D’accord. Les arbres ils sont chez toi. Mais leur ombre est sur mon jardin. Parfaitement ils sont mal placés tes arbres. Ils sont juste au milieu de mon potager. Ce qui fait que toute l’année et du matin au soir, cette ombre tombe sur mes légumes… ils me mangent mon soleil tes arbres et on n’a pas le droit de manger le soleil de personne.
-         Écoute Barnabé, ce n’est pas de ta faute mais pour lui, tes ormes sont mal placés.
-         C’est peut-être ton jardin qui est mal placé. Mes arbres, personne n’y touchera.
-         Ah bon c’est comme ça ? Et bien on ira au juge de paix. Et en attendant je te retire la parole.
-         ¡Eh tu el cura!
-         ¿Qué hay?
-         Escúchame. Esos tres olmos no te sirven para nada. Están en las lindes de tu prado. Por lo tanto, ¿qué te importa cortarlos? Es más, te daría leña para este invierno.
-         ¡Ah, pero esos árboles son míos! Los cortaré si me da gusto. ¡Solo faltaba que me obligaras a cortar unos árboles que están en mi casa!
-         Ah bien. De acuerdo. Los árboles están en tu casa. Pero su sombra está en mi jardín. En efecto, están mal situados tus árboles. Están exactamente en medio de mi huerta. Y por ello, todo el año, desde la mañana hasta la noche, esa sombra cae sobre mis legumbres… se comen mi sol tus árboles y nadie tiene el derecho de comerle el sol a nadie.
-         Escucha Barnabé. No es tu culpa pero para él, tus olmos están mal situados.
-         Quizás sea tu jardín el que está mal situado. Mis árboles, nadie los tocará.
-         ¿Con que esas tenemos? Pues bien, iremos al juez de paz. Y mientras tanto, te retiro el saludo.   
          La mujer del panadero (Marcel Pagnol) 1938.

jueves, 7 de julio de 2011

Fringe: más pistas

Fringe (fleco en inglés) es la serie más original que se me ha dado ver en mis últimos 50 años de vida.

No solo por su fantástico guión sino por todos los extras que la envuelven.

Cómo he buceado un poco por esos añadidos, me propongo explicaros lo que he sacado en limpio. Eso es lo que os ahorráis en investigación propia y bien podéis tomar el relevo a partir de aquí.
1º - Lo primero es hablaros de los glifos: seré breve porque hay mucha explicación por toda la red.
¿Os habéis fijado en las bonitas transiciones a lo largo de la serie?


Se trata de unas imágenes de misteriosos animales hojas o frutas que parecen casuales.


Pues no lo son. En realidad se trata de un abecedario inventado por el equipo fringe (un fleco más) y además suelen escribir secuencialmente una pista sobre el episodio que estamos viendo.
Para ir al grano, aquí os dejo el alfabeto en cuestión.
2º - Lo segundo es lo de los códigos QR. En el poster siguiente tenéis uno abajo y a la izquierda.

Concretamente este:
Pues bien: estos códigos QR son una especie de código de barras más elaborados que utilizan corrientemente en Japón y que se pueden leer con un simple programa que podéis encontrar en la red bajo el nombre de “barcapture”.
Normalmente, cuando escaneáis un código QR os suele llevar a alguna página de internet relativa al lugar en que lo habéis encontrado. En el caso de este poster de Fringe nos lleva a este vídeo en el que nos felicitan por haber “roto” el código.


Consejo mío: Barcapture os permite aislar el código QR dentro del poster pero sería más difícil que lo hiciera si el código apareciese durante la película. Así que os aconsejo que tengáis a mano otro programita gratuito como es “HyperSnap-DX Pro”. Se trata de un capturador de pantalla por lo que podéis “fotografiar” cualquier cosa que salga en vuestra pantalla. Yo lo utilicé por ejemplo al ver un documental sobre el juego Assassin’s Creed. Sobre el marco de una puerta aparecía un código QR que pude “fotografiar” con el HyperSnap.
Escaneé la imagen resultante con Barcapture y ¡Premio! Me remitió a la página de ubiworkshop, la tienda virtual de assassin’s creed. No soy muy comprador de tonterías pero sentí una gran satisfacción al comprobar el mensaje oculto sobre el marco de la puerta del lugar en que se estaba creando el juego.
Aqui tenéis más información.

3º - Las claves ocultas dentro de la serie en forma de símbolos cuasi-masónicos. Supongo que si habéis llegado a leer hasta aquí es que realmente sois fringianos por lo que no me extiendo más. Una imagen vale más que mil palabrotas.
4º - Leyendo otros blogs me encontré con este misterio que no acabo de entender. ¿Están realmente relacionados Massive Dynamics con Mercadona? (fijaos en las pantalla a la izquierda de Hurley Reyes (el de Lost que tambien aparece en Fringe (aquí junto a Walter (¡Viva JJ Abrams! (me encantan los paréntesis))))).
¿A que habéis comprobado si estaban bien todos los paréntesis?

5º - Aporto mis propios guiños a Fringe: sabéis (si habéis llegado hasta aquí es que lo sabéis) que un puntazo más de la serie es que aparezca el gran Léonard Nimoy, esto es: el sr. Spock, el Oficial Científico Vulcano de la nave U. S. S. Enterprise de Star Trek Original.
Pues bien. En el episodio 3x12 de Fringe podemos ver al lado del diploma de William Bell (Léonard Nimoy) un libro de consejos para cuidar niños y bebés (Baby and Child Care) del Dr. Spock.

6º - De regalo yacen aquí estos wallpapers de Fringe recogidos al hilo de mi curiosidad en la red.
Olivia-Bolivia; Walter-Walternativo... y vice-versa.
Lo dicho: fijaos en todas las pistas que siguen...
El tatuaje inalterable en cualquier universo.
Un pequeño homenaje por mi parte.

lunes, 4 de julio de 2011

Principio de funcionamiento del impulsor centrífugo del aerojeep

Esta descripción que traduzco a continuación proviene del maravilloso comic (o más pedantemente: novela ilustrada) de Léo.
Hago notar que Léo no solo es el dibujante de las viñetas de esa sugerente obra, sino también su guionista (y para los puristas; también el colorista).
Léo se llama en realidad Luiz Eduardo de Oliveira, nacido el 13 de diciembre de 1944 en Rio de Janeiro. Sin embargo, gracias al desgraciado de Pinochet, Léo emigra a Francia donde sus comics se publican en la editorial Dargaud.
 De la segunda tanda de su saga “Les mondes d’Aldébaran”, concretamente de Beltegeuse, os traduzco su muy ingeniosa explicación de cómo funciona uno de sus inventos más notables dentro de la historia: su aerojeep. Un coche que vuela y permite a sus ocupantes recorrer de manera cómoda el impresionante mundo terramorfo de Beltegeuse.
Si tenéis ocasión de adquirirlos os animo encarecidamente a que los leáis. Se instalará en vuestras mentes un ambiente de humanidad, de sol y naturaleza que no podréis obtener de ninguna otra manera. 






El aerojeep y en lugar de sus neumáticos: Los cilindros contenedores de los impulsores centrífugos.

Traducción:


Sobre una varilla que gira alrededor de un eje (A), un peso móvil (P) puede deslizarse de un extremo a otro. El movimiento de rotación engendra sobre el peso una fuerza centrífuga que lo propulsa hacia el extremo (fig. 1). Supongamos que mientras sigue rotando, la varilla pone en marcha un electroimán (E) situado en su base (fig. 2) capaz de tirar del peso hacia él (fig. 3) y que, una vez superada esta posición, el electroimán se desactiva. El peso así liberado será empujado de nuevo hacia fuera por la fuerza centrífuga (fig. 4).
 

De esta manera, el peso P describe una curva excéntrica (fig.5) alrededor del eje A. Dado que la fuerza centrífuga generada por un cuerpo en rotación crece en función de la distancia del eje de rotación, es evidente que en la posición de la fig. 1 la fuerza centrífuga generada por P es superior a aquella generada en la posición de la fig.3. Como resultado, el conjunto descrito será propulsado hacia arrida cuando se ponga en marcha.

El impulsor centrífugo del aerojeep se basa en este principio. Dentro de los cilindros a modo de ruedas, cientos de esas varillas, giran todas a una a muy alta velocidad, generando una fuerza considerable. Parte del empuje resultante es utilizado para contrarrestar el peso del vehículo y hacerlo “flotar”, mientras que otra parte se utiliza para desplazarlo. Jugando con los electroimanes, los mandos de control permiten orientar la fuerza resultante en la dirección requerida gracias a un pequeño impulsor en el eje vertical (situado en el capó delantero).


La energía eléctrica necesaria para hacer girar el eje A y para alimentar los electroimanes es suministrada por una pila de fusión nuclear de tipo Raederer-Moreira.





2 Les Survivants, Dargaud, mars 2001
Scénario, dessin et couleurs :
Leo - (ISBN 978-2205049879)





 Yo no le veo más pega que la de la eficacia a la hora de mover unos pesos diminutos que tienen que compensar su falta de peso con una enormísima velocidad para conseguir la fuerza centrífuga que compense el peso del vehículo (y sus ocupantes).

Pero teóricamente me parece muy bien construido y en todo caso se trata de un excelente reto para que penséis en ello.

Para que veais lo serio que es esto, aquí os lo dejo en su versión alemana.

domingo, 3 de julio de 2011

Riccardo Muti va Pensiero Berlusconi

El 12 de marzo pasado, Italia festejaba el 150 aniversario de la creación de Nabucco.

Ya sé que hay ya muchísimas entradas de Riccardo Muti lanzando ese sentido discurso en la Opera de Roma. Un alegato a los malos tiempos para la cultura que – recalca Muti – es la mejor seña de identidad de su país.

Si. Hay muchas entradas pero yo también quiero poner la mía. Me parece importante y emocionante.

Emocionante porque – como quién no quiere la cosa -  le cantaba las cuarenta al mismísimo sr. Berlusconi que estaba en su palco de honor. El mismo Berlusconi que acababa de recortar los presupuestos del estado por donde siempre: la cultura y el pueblo. Es decir; lo superfluo.

Esta vez las sombras le salvaron de notarle los colores pero los intuimos entre las oscuras figuras que moran entre el público.

Y qué bonito que Muti, la encarnación de la tranquilidad, le pidiera a ese público de Roma que le acompañase con el Va pensiero del Nabucco de Verdi. 

Va pensiero. Ve, pensamiento... de Berlusconi y de todos tus acólitos de poder.

Esta vez todos somos Romanos.


Ricardo Muti: Ya no tengo 30 años y he vivido mi vida, pero como Italiano que ha recorrido el mundo, tengo vergüenza de lo que ocurre en mi país. Así pues, accedo a vuestra petición de bis para el “Va pensiero”. No es solo por la alegría patriótica que puede sentir, sino porque esta noche, mientras dirigía el Coro que cantaba “O mi país,  bello y perdido”, pensé que si seguimos así, vamos a matar la cultura sobre la cual se ha construido la historia de Italia. En cuyo caso, nuestra patria, estaría realmente perdida.
[Aplausos]
Desde que reina por aquí un “clima italiano”, yo, Muti, me he callado durante demasiado tiempo. Querría ahora… deberíamos dar un sentido a este canto; como estamos en nuestra Casa, el teatro de la capital, y con un Coro que ha cantado magníficamente, y que está magníficamente acompañado, si os apetece, os propongo que os unáis a nosotros para cantar todos juntos.